Un año entero es un montón de tiempo.
Cuando empieza piensas en todas las cosas que podrías hacer antes de que acabe.
Aprender a cantar es una de esas cosas.
¿Pero es posible conseguir muchas cosas de tu voz en un año?
Seguro que un montón de personas en todo el mundo pensaron el día 31 de diciembre de 2015: «este año es mi año, voy a aprender a cantar».
De ese montón de personas algunas lo habrán dejado antes de empezar.
Porque cuando nos proponemos hacer algo, la mayoría de veces no somos conscientes de las implicaciones que va a tener hasta que empezamos a hacerlo. :/
Una vez empiezas te das cuenta de que las cosas no son tan fáciles como pensabas.
Que toca currárselo bastante.
Si la relación entre el esfuerzo y el beneficio no te compensa, es probable que estés entre los que lo deja antes de empezar.
Y harás muy bien.
Es mucho más sano enfocar tus energías en algo que te compense y el resto de energías dedicarlas a disfrutar de la vida.
Y cantar es una de esas cosas que requieren mucha dedicación, sobre todo si no tienes facilidad, así que tiene que gustarte de verdad.
Si te compensa el esfuerzo de trabajar en tu voz con la felicidad que da hacerlo cada vez mejor, estás entre los que van a avanzar mucho de un 1 de enero al siguiente.
Eso sí, tu objetivo tiene que ser realista.
Por ejemplo: si no puedes afinar bien todavía, no te marques como objetivo cantar una canción de Beyoncé, márcate como objetivo conseguir afinar con los ejercicios y con alguna canción sencilla.
¿Qué supone un año de trabajo vocal para tu voz?
Como siempre, la respuesta depende de varios factores.
El primero, los grados de trabajo vocal
Como en todo, y por varios motivos, uno puede trabajar su voz de diferentes maneras y a diferentes niveles.
Es importante conocer las maneras de trabajar que te van a reportar beneficio y las que no, para que así no pierdas más tiempo del necesario con las que no.
Con la voz se trata de entrenar como con cualquier instrumento, así que las mejores maneras son muy similares a las maneras de practicar con un instrumento.
Vamos a ver algunas:
#1: Buscar información por Internet
En Internet hay muchísima información y muy útil.
Empaparte bien de toda esa información es buenísimo para ti, porque te ayuda a entender conceptos que te resultan complejos.
Pero todo esto, por mucho que leas e investigues, es sólo la punta del iceberg.
El canto es una habilidad motora, es decir, que se mejora la habilidad si la practicas.
Practicar entendiendo lo que haces es esencial, pero la mayor parte del tiempo tienes que dedicarla a practicar con ejercicios.
Por poner un símil, si quieres estar en forma, por mucho que leas sobre nutrición y fitness, si luego comes cualquier cosa y no haces ejercicio o haces muy poco, es imposible que lo consigas.
Así que buscar información por Internet no es la manera de conseguir el objetivo que te has marcado para este año.
- Primero, porque lo malo que tienen los ejercicios que puedas encontrar por Internet es que no son personalizados.
Pueden no ser los que necesitas, así que por mucho que los repitieras sin parar es posible que siguieran sin servirte. - Y segundo, porque esto no se aprende en un día. 🙁
En el caso remoto de que hayas dado con los ejercicios correctos para ti, si no los practicas diariamente no los dominarás.
#2: Tener un profesor que te dé ejercicios personalizados
O nuestro programa para aprender a cantar, que te da ejercicios personalizados.
Con esto podrás avanzar más, ya que estás dedicando tu esfuerzo a algo que está pensado para mejorar tu voz.
Porque necesitas que alguien analice tu voz y te dé ejercicios que te hagan mejorar concretamente a ti.
Pero como siempre, la cosa no es tan fácil. No conseguirás avanzar si no practicas en casa.
Y hay varios niveles de mejora dependiendo de esto:
- Si vas a clases de canto y sólo practicas cuando estás en la clase de canto o practicas con los ejercicios del programa de entrenamiento pero sólo un día de tanto en tanto, el avance es muy limitado.
Es posible que en un año tan sólo sientas que puedes cantar un poco más cómodamente, pero no notes ningún cambio espectacular, porque tienes que asimilar los nuevos conocimientos, y eso se consigue practicando un montón. - Si repasas la rutina una o dos veces a la semana, puedes conseguir cosillas.
Estás practicando los ejercicios aprendidos y eso hace que tu cerebro trabaje en asimilar las nuevas conexiones.
Sentirás como en unos meses ya cantas mucho más cómodamente y puedes hacer notas que antes te costaban más. - Practicar todos los días y bien concentrado en lo que estás haciendo.
Esto es lo ideal, porque vas a poder asimilar mucho más rápido lo que has aprendido y aprenderás a conocer mucho mejor tu voz. Notarás avances y sentirás cómo realmente estás mejorando.
Resumiendo: Para dar el máximo de ti tienes que practicar todos los días con ejercicios personalizados. Hacer menos que esto supondría no avanzar tanto como podrías.
¡Ojo!¡Esto no tiene por qué ser malo! Si no tienes mucho tiempo libre y no te importa avanzar más despacio, está muy bien.
Sólo quiero que conozcas lo que puedes esperar de tu voz. 🙂
Como es lógico, otro factor a tener en cuenta son tus aptitudes y tu facilidad para aprender, por eso insisto en que si sigues estos parámetros avanzarás todo lo que podrías avanzar.
Así que si tu propósito para el 2016 fue aprender a cantar, pero no lo conseguiste o casi no avanzaste, ahora ya sabes porqué fue: tu objetivo quizás fue demasiado grande, o no estudiaste con unos ejercicios personalizados, o no le dedicaste tiempo en casa…
Como ahora tienes más información sobre qué es lo que puedes esperar conseguir dependiendo de lo que estés dispuesto a invertir, sobre todo en cuanto a tiempo, ¿que te parece renovar tu propósito para el 2017?
Si realmente quieres hacerlo, ¡a por todas! Con 30 minutos al día ya harías mucho por tu voz.
¿Y tú? ¿Has pensado ya en tus propósitos para el próximo año? ¡Cuéntanoslo en los comentarios!