¿Puedo cantar sin que se me marquen las venas del cuello?

venas del cuello al cantar

Todo el mundo las ve, y todo el mundo se lo pregunta.

¿Esas venazas del cuello de algunos cantantes es algo normal?

Si es normal… ¡¿ES SANO?!

Las dudas están ahí, y por eso vamos a tratar no sólo de disiparlas.

Si tú también tienes esos venotes en el cuello cuando cantas, también vamos a hacer algunos ajustes en tu voz para erradicarlas 🙂

¿Qué vamos a aprender hoy sobre las venas del cuello?

  • En términos generales, ¿por qué aparecen?
  • ¿Qué tenemos que buscar en la voz para que dejen de aparecer?
  • 4 causas concretas y comunes por las que muchos cantantes las sufren
  • 4 ejercicios prácticos para tratar de reducir la presencia de cada una de las causas

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Transcripción del episodio

Supongo que a estas alturas ya sabes que cualquier tensión innecesaria en tu cuerpo no te va a ayudar al cantar.

De hecho, lo que hará será entorpecerte, en el mejor de los casos, y daño en el peor.

Es algo que prácticamente todo el mundo entiende.

¿Pero qué pasa con esas venas del cuello que asoman la cabeza cuando cantas?

Y no sólo te pasa a ti, también les pasa a muchos cantantes famosos.

¿Será entonces que es algo bueno?

Si lo es, ¿cómo puedes provocarlo?

Si no lo es, ¿cómo puedes evitarlo?

Dejémonos de suspense: aquí tienes la respuesta

Que se te marquen las venas del cuello al cantar NO ES BUENO.

Es una consecuencia de hacer mucha fuerza.

Concretamente se trata de que las cuerdas vocales están ofreciendo una gran resistencia a un gran caudal de aire que proviene de los pulmones.

Es así de sencillo.

Lo que no es tan sencillo es regular esa resistencia y ese aire si no lo has hecho nunca antes.

¿Pero entonces por qué les pasa a muchos cantantes famosos?

Los cantantes famosos no suelen ser famosos por su técnica.

Lo son por cómo cantan y por qué canciones cantan.

Y esto no sólo pasa con la voz.

Los mejores músicos, técnicamente hablando, no tienen por qué ser los mejores músicos, artísticamente hablando.

Vamos a analizar el problema con más detalle

La explicación que te he dado sobre por qué se te marcan las venas del cuello cuando cantas es correcta, pero poco detallada.

Pero antes de ver cómo podemos empezar a arreglar este problema, que lo veremos en un rato, tenemos que entenderlo un poco mejor.

Y para entender algo no hay nada mejor que experimentarlo.

Para hacerlo es muy fácil.

Plántate delante de un objeto muy muy pesado, uno que no puedas levantar, y ten un espejo o la cámara de tu móvil delante para poder verte el cuello.

Ahora intenta levantarlo con todas tus fuerzas y observa cómo las venas de tu cuello se van haciendo cada vez más y más visibles.

¿Sientes el esfuerzo que estás haciendo?

Ese esfuerzo es el que queremos evitar a toda costa mientras cantamos.

Pero como te comentaba antes, no siempre es fácil dejar de hacer algo que ni si quiera sabías que hacías, aunque eso no quiere decir que sea imposible…

Tenemos que empezar a cambiar algunos hábitos, y la cosa empezará a ponerse en su sitio.

Para ello, vamos a ver unos cuantos ejercicios, pero como siempre: hazlos bajo tu responsabilidad.

No puedo garantizarte que sean los ejercicios que necesitas, así que hazlos con cabeza, y si sientes molestias o ves que algo va mal, deja de hacerlos inmediatamente.

Además, recuerda que son sólo ejercicios generalistas en los que no puedes basar un entrenamiento completo.

Lo que estoy tratando con estos ejercicios es mostrarte el inicio de un nuevo camino.

¡Manos a la obra!

Hay 4 causas principales por las cuales las venas del cuello sacan la cabeza.

Vamos a ver cada una de ellas y te daré instrucciones para que puedas empezar a evitarlas.

Causa #1: Demasiada presión de aire

Esta la causa principal, y es relativamente fácil de sentir cómo puede ser utilizar la voz de manera más fácil.

La forma es utilizar uno de mis ejercicios preferidos: el lip bubble.

El propósito es regular la cantidad de aire que utilizas, y para eso tienes que asegurarte de que tus labios no vibren demasiado rápido y de no utilizar demasiado volumen.

Controlar ambas cosas te ayudarán a reducir la tensión, y si tiendes a gritar, también te ayudará a evitar ese hábito.

Esto lo tenemos que hacer en nuestros dos registros vocales principales: en la voz de pecho y en la voz de cabeza.

Vamos a hacer un par de ejercicios para esto, primero en una nota sostenida de cada registro, y luego haremos unas escalas, para que puedas ir buscando el mantener la velocidad de la vibración de tus labios y un volumen constante.

Para los chicos, esta nota en voz de pecho: (El ejemplo está en el audio)

Y para las chicas, también en voz de pecho: (El ejemplo está en el audio)

Repite este sencillo ejercicio tantas veces como sea necesario hasta que consigas reducir el volumen y la vibración de tus labios.

Ahora lo mismo, pero en notas de voz de cabeza.

Para los chicos: (El ejemplo está en el audio)

Para las chicas: (El ejemplo está en el audio)

Y ahora haremos lo mismo con una escala muy sencilla.

Recuerda: ten presente en todo momento el mantener un volumen reducido y constante, y una vibración de tus labios lo más lenta posible.

Empiezan los chicos: (El ejercicio está en el audio)

Y ahora las chicas: (El ejercicio está en el audio)

Causa #2: Tensión de la musculatura externa

Cuando los músculos externos de tu cuello se tensan, estrujan a tu laringe y a tus cuerdas vocales, lo cual suele desembocar en los venotes del cuello si la fuerza es exagerada.

Para esto el lip bubble también va muy bien, así que te recomiendo hacer los ejercicios que te acabo de enseñar antes del ejercicio que vamos a ver ahora.

Es necesario que puedas acceder a tu falsete o a tu voz de cabeza para poder hacerlo correctamente, para no hacerte daño ni coger malos hábitos.

En este ejercicio utilizaremos la sílaba FU, asegurándonos de que la U es muy UUUU.

De nuevo, el volumen debe ser más bien bajito, y recuerda acceder a tu voz de cabeza nada más empezar.

El ejercicio suena así: (El ejemplo está en el audio)

Empiezan las chicas: (El ejercicio está en el audio)

Y siguen los chicos: (El ejercicio está en el audio)

Causa #3: Tensión de la musculatura interna

Si la presión de aire es la adecuada y los músculos externos de tu cuello no están tensos, puede ser que estés utilizando demasiada masa muscular de tus cuerdas vocales.

Vamos quitando capas y capas de tensión pero, aún y así, esta por sí sola puede ser el problema de todo.

Para empezar a reducir esa presión, tenemos que asegurarnos de utilizar el mínimo de masa muscular posible de las cuerdas vocales.

Seguimos sin buscar un volumen fuerte ni nada por el estilo.

Ahora vamos a tratar de usar la voz al mínimo.

El ejercicio suena así: (El ejemplo está en el audio)

Empiezan los chicos: (El ejercicios está en el audio)

Y siguen las chicas: (El ejercicio está en el audio)

Causa #4: Te quedas sin aire

Puede que todo lo anterior no sea un problema para ti, o al menos no directamente, y aún y así las venas del cuello se te acaben marcando.

El motivo puede ser simplemente por una mala gestión del aire, pero suele ser muy muy fácil de solucionar.

Sólo tienes que prestar un poco más de atención, y coger aire más a menudo.

Si tratas de exprimir hasta la última gota de aire de tus pulmones, lo harás mediante la tensión de tus músculos abdominales, y esa tensión se traspasará a tus músculos externos e internos de tu cuello.

Tampoco es buena idea que cojas muchísimo aire para así tener más cancha porque eso puede hacer que la causa número 1 de la que te he hablado se convierta en una realidad.

No hace falta que hagas ejercicios de respiración.

Simplemente, presta atención y respira más a menudo.

Imagen: Algunos derechos reservados por justforfun310

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