¿Por qué tengo que grabarme y escucharme?

por qué tengo que grabarme y escucharmeComo cantante, es necesario que te grabes y te escuches regularmente.

Puedes mejorar muchos aspectos, tanto de tu voz como de tu enfoque como cantante, y muchas veces ves cosas que de otra forma no verías y eres consciente de cosas que de otra forma no serías consciente.

En este artículo quiero que veas conmigo algunas de estas cosas y también quiero darte algunas pautas para que tengas un poco más fácil el tema de grabarte.

¿Por qué tienes que aprender a que te guste tu voz?

Porque si quieres cantar, ¡poco vas a conseguir si no te gusta propia voz!

Si no te acostumbras a tu voz, cada vez que te escuches para ver cómo te ha quedado una grabación, para encontrar cosas que puedes mejorar, para ver si te gusta más una línea melódica en vez de otra, … todo va quedar enmascarado porque a tu oído le va a chocar el sonido de tu voz.

Es lo único que va a escuchar.

A partir de ahí no hay nada que hacer, nada te gustará.

¿Cómo puedes acostumbrarte al sonido de tu voz?

Grabándote y escuchándote, grabándote y escuchándote, …

Al principio choca mucho escucharse a uno mismo desde fuera.

Es una sensación rarísima.

Pero, como seguramente ya habrás leído miles de veces, a todos nos pasa y es algo normal, pero para el resto de las personas tu voz es completamente normal.

A base de escucharte una y otra vez en una grabación, empiezas a notar menos esa diferencia y a relacionar más lo que tú escuchas con lo que se escucha desde fuera.

Es VITAL que te acostumbres a tu propia voz si no quieres entorpecer tu avance como cantante.

Te prometo que con un poco de tiempo tu voz te parecerá tan normal y podrás verla de forma objetiva.

¡Pero es que la gente me dice que mi voz no suena bien!

Lo primero y más importante: para gustos, colores.

La voz es algo muy personal y sólo con que unas pocas personas te digan que lo haces mal o que tu voz es fea, te puede sentar muy mal y hacerte pensar que a nadie le gusta tu voz.

Y en la mayoría de casos la gente lo dice despectivamente.

Olvídate de eso, porque no te hará ningún bien.

A la primera persona a quien le tiene que gustar tu voz es a ti.

Dedícate tiempo a escucharte y a acostumbrarte a ella, como te he comentado antes.

Y si realmente estás al nivel de que no te guste NADA tu voz, pasa una semana grabándote sólo hablando o leyendo y luego escuchándote durante un buen rato.

Eso debería allanar el camino para que cuando te escuches cantar, tus oídos no estén tan a la defensiva.

Una última cosa sobre el sonido de tu voz

No te olvides de algo muy importante: a medida que vas siendo mejor cantante, el sonido de tu voz también mejora.

Tener paciencia contigo mismo y evolucionar con tu voz te ayudará un montón.

¿Cómo me grabo?

Para grabarte necesitas dos cosas:

  1. Un programa de grabación.
  2. Un micrófono.

El programa de grabación

Si utilizas un Windows, Mac OS o Linux, sin duda te recomiendo el programa gratuito Audacity.

Puedes hacer clic aquí para ir a su página web y descargarlo.

También puedes grabar con tu smartphone, hay infinidad de apps tanto de pago como gratuitas.

Personalmente prefiero grabar con un ordenador por la comodidad de utilizar el ratón y el teclado y tener una pantalla más grande, pero hoy en día no hay más diferencia que esa.

El micrófono

Aquí sí que te recomiendo invertir un poco.

Tampoco mucho, entre 30 y 60 euros es más que suficiente.

Si la calidad del micrófono es mala, la grabación que escuches no te va a dar una visión más o menos real de lo que se escucha desde fuera de tu cabeza.

Eso te puede llegar a confundir bastante.

Si no te quieres gastar mucho, un micrófono que está bastante bien es el Rode Smartlav+.

Es una opción muy interesante, porque es un micrófono de corbata y eso lo convierte en algo nada aparatoso.

Además (parezco un vendedor de teletienda 😛 ), está preparado para grabar con un smartphone, por lo que en ese sentido es mucho más cómodo.

Si quieres algo más profesional, es mejor que te asesore un experto 🙂

Una vez lo tienes todo listo, ¿qué tienes que grabar?

¡No puedes ponerte a grabar al tuntún sin más!

Todo depende de lo que estés buscando.

Por ejemplo, si te preocupa desafinar, es mejor que empieces grabando escalas muy cortas de la cuales te sepas las notas.

Graba a un ritmo lento para que cuando te escuches puedas seguir la grabación con un piano y comparar las notas.

Si por ahí no tienes problemas, tocará probar con canciones.

Pero no grabes una canción entera del tirón.

Elige canciones lentas.

Primero céntrate en fragmentos pequeños, de los cuales también tendrás que saberte las notas para repetir el mismo proceso de comparación con el piano.

Si lo que estás buscando son formas de mejorar el sonido de tu voz, céntrate en un rango muy muy cómodo, con algún trozo de alguna canción que te guste.

Es importante que no te dejes influir por la voz del cantante de la canción original, porque el objetivo no es copiar al cantante, sino hacer que tu voz suene mejor.

No olvidemos que imitar timbres de voces de otras personas para cantar puede ser malo.

Pero no sólo tienes que centrarte en la parte técnica.

También puedes buscar mejorar tu estilo y centrarte en encontrar el tuyo propio.

Puedes probar diferentes adornos vocales, ver si estás repitiendo todo el rato los mismos, tratar de bajar el volumen aquí, subirlo allá, alargar más esa nota, en una nota sostenida empezar a usar antes el vibrato, a usarlo después, …

Lo que se te ocurra 🙂

¿Eres autodidacta?

Si lo eres, todo esto que te he explicado cobra aún más importancia.

Por ejemplo, si un día das con una forma de cantar notas agudas con potencia en vez de pasar a falsete, no te hará daño comprobarlo desde fuera.

Grábate haciéndolo y escúchate con oídos críticos.

¿Sigues afinando? ¿Suena gritado? ¿Cambias unas vocales por otras?

Esto es muy importante, ya que debes ser tú tu propio profesor.

¿Es necesario grabarte en vídeo?

Si lo que quieres es cantar en público, sin duda esto es algo muy interesante.

Te ayudará a ser consciente de lo que haces con tus manos, tus brazos, tu cara, etc. ¡y también de lo que no haces!

Pero por el hecho de grabarte en vídeo no tienes por qué sacrificar la calidad del sonido.

Graba el audio con un micrófono que esté bien para luego poder relacionar lo que ves con lo que oyes.

Es probable que necesites un programa de edición de vídeo para sincronizar la pista de vídeo y de audio.

No lo he usado todavía, pero he leído cosas muy buenas sobre OpenShot.

¡Dale caña al tema de grabarte! Verás cómo te ayuda 🙂

Imagen: AtribuciónNo comercial Algunos derechos reservados por TomBorowski

  • gloria velaquez dice:

    estoy maravillada con sus temas.. gracias por existir..

  • keren dice:

    Mi voz suena como una niña en las grabaciones y chillona.

  • Estela Torboli dice:

    Gracias pensaba que solo yo era la que escuchaba su voz fea al. Grabarse!! Me sirven mucho sus consejos ya que canto en un coro!!

  • Biaggio Manduca dice:

    Hola Carlos, realmente los felicito, sus artìculos son muy buenos, y de gran ayuda. Sigan adelante, hermano!

  • David Vargas dice:

    Hola buenas. Quisiera saber si a la hora grabar mi voz es necesario escuchar también por los cascos el sonido de mi voz junto con la música para que suene mejor. Gracias.

  • David Vargas dice:

    A propósito, es maravilloso poder contar con la ayuda de una personas tan altruista dispuesta a dar lo mejor para conseguir lo mejor de los demás. Muchas gracias y por favor no cambies nunca.

  • >