El anti-sensei es un personaje vil y despreciable, aunque bastante gracioso.
El anti-sensei representa todo aquello con lo que estamos en contra de la enseñanza vocal actual, y es más que probable que ya te hayas encontrado con más de uno.
Normalmente son cantantes que cantan bien y que «se quieren sacar un dinero extra», por lo que se ponen a dar clases de canto sin tener ni idea de lo que hacen.
En este artículo te resumimos una típica clase de canto con un anti-sensei. Seguro que te suena más de una cosa y, si es así, valórate más y busca a alguien mejor para entrenar tu voz.
(Pincha aquí para ver el infográfico a mayor calidad)
10 minutos de postura
El anti-sensei te hará perder 10 minutos de tu clase adoptando posturas que no te ayudan a cantar mejor.
Hay posturas incorrectas, pero son anti-naturales y ni mucho menos necesitas practicarlo en cada clase durante 10 minutos.
No es tan difícil, y mucho menos es lo más difícil del canto.
10 minutos de respiración
El anti-sensei vive en el pasado y aún cree que es necesario trabajar tu diafragma… A TODA COSTA.
¡10 minutos más perdidos!
De la respiración y del diafragma hemos hablado infinitas veces, así que si no conoces nuestra postura al respecto, ¡estás tardando! 🙂
Cuando descubrí una nueva forma de verlo, mi visión sobre el canto cambió radicalmente y pude empezar a mejorar.
10 minutos de estiramientos
Los estiramientos son esenciales, o eso cree el anti-sensei… 10 minutos estirando músculos que no sirven para cantar.
Como mucho, los estiramientos te ayudarán a relajar algunos músculos, pero esos músculos volverán a entrar en tensión cuando empieces a cantar, y toda esa relajación se irá por el desagüe.
El truco no es relajar los músculos. El truco es aprender a no utilizarlos cuando cantas.
10 minutos activando resonadores
Unos pequeños golpecitos en tus mejillas activarán tus resonadores, y te dejarán inconsciente 10 minutos más.
Todo para nada…
Hay que aprovechar la era en la que vivimos y hacer caso a los descubrimientos científicos que se siguen haciendo sobre la voz para evitar este tipo de mitos.
20 minutos cantando
Por fin tendrás tiempo de cantar mientras el anti-sensei se echa una cabezadita… ya ha acabado su duro (e inútil) trabajo.
Cuando llega el momento de cantar en tu clase de canto, no se trata simplemente de que tu profesor te diga lo bien o lo mal que lo haces.
Te tiene que decir cosas concretas a mejorar (no vale la solución comodín de la respiración…) y, más importante, cómo arreglarlas.
Para conseguirlo hay que hacer un trabajo técnico más allá de cantar por cantar.
¡Te están engañando!
No vuelvas semana tras semana a estas «clases de canto».
Si no sientes que tu voz mejore día tras día, debes buscar otro camino, lejos de los anti-sensei.
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Gracias a vosotros por los excelentes consejos que dais. Estos timadores quieren tu dinero y poco les importa que su alumno progrese cantando.
Leo y pongo en práctica todos los consejos que editais. Sé que a mis 66 años mucho puedo aprender aún y les estoy muy agradecido. Desde Argentina, Daniel Ceratti
Gracias por ser uno más en la confirmación de que esta gente existe, Daniel!
Muchas gracias por toda la información que nos regalan y nos hacen ver a los que somos principiantes qué no debemos de buscar en un maestro.
Yo dejé de ir a clases de canto porque me agotaba mucho, me quedaba ronca y supe que eso no estaba bien. Aquí cerca no hay buenos maestros, por eso trabajo con recursos del Internet.
Gracias por su aplicación, me ayuda muchísimo y gracias por cada podcast, que no me lo pierdo.
Un saludo desde México
Gracias por tu comentario, Ana! Me alegro mucho de que sigas nuestro trabajo, y más me alegro aún de que te alejases de esas clases de canto al salir de ellas te dejaban peor en vez de mejor (es algo que pasa demasiado).