Me da la tos cuando canto. ¿Qué puedo hacer?

tos al cantarNo es usual, pero pasa.

A veces estás cantando y te da la tos.

Por lo general, no es algo de mayor trascendencia, pero hay momentos en los que sí vale la pena estar mejor informado sobre esa tos.

Informémonos juntos 🙂

¿Estás constipado?

Esta primera razón es bastante evidente.

Cuando estás enfermo la generación de mocos incrementa, y también su consistencia (espero que no estés merendando ahora mismo).

Esa mucosidad se suele anclar en las vías respiratorias y en las cuerdas vocales.

Cualquier cuerpo extraño que toque tus cuerdas vocales te hará toser, y si ese cuerpo extraño además resulta ser un moco muy consistente que no se despega, no pararás de toser.

Por otro lado, cuando estás enfermo tus cuerdas vocales se suelen inflamar e irritar.

Eso las hace mucho más sensibles a todo esto, y además pueden dolerte por la propia inflamación, lo que vuelve a generar tos al disparar ese mecanismo de expulsión de cuerpos ajenos que te he comentado.

Una maravilla, vamos.

Si te encuentras en este estado, lo primero que te recomiendo es que no cantes y que hables lo menos posible.

Si sabes lo que estás haciendo o si tienes a alguien que lo sepa, puedes hacer algunos ejercicios suaves durante un periodo muy corto de tiempo para que tus músculos vocales no pierdan tonicidad y así puedas volver a tu estado óptimo más rápido.

Si no, insisto: descansa hasta estar bien y utiliza tu voz lo menos posible.

Pero puedes hacer otras cosas para frenar esa tos y además acelerar tu recuperación.

Vahos

Hacer vahos es una maravilla para la voz.

Es la forma más rápida y directa de humedecer tus vías respiratorias.

Sólo eso promoverá una recuperación más rápida, pero hay otro efecto beneficioso más inmediato.

Esos mocos consistentes de los que te hablaba (los que no se van por mucho que tosas), se empezarán a despegar de tus vías respiratorias y podrás expulsarlos.

Por unos momentos esto te provocará aún más tos, pero si los expulsas te sentirás mucho mejor al momento, vocalmente hablando.

Nada de lo que puedas comer o beber te va a ir tan bien, porque nada de eso afecta directamente a tus cuerdas vocales, con excepción de algunas cosas que puedes encontrar en el enlace.

Beber líquidos

Sí, nada de lo que bebas te va a ir tan bien, pero eso no quiere decir que no ayude 🙂

Beber agua y zumos de frutas promueve la eliminación de toxinas y la depuración del cuerpo.

Por otro lado, sólo el hecho de tragar más es algo parecido a “rascarte la garganta”, lo cual también puede ayudarte a calmar ese picor que te hace toser.

Dormir bien

Dormir bien te ayudará a recuperarte más rápido y a que tu cuerpo esté menos hinchado (aparato fonador incluido) que cuando duermes mal o poco.

Eso te ayudará a sentir menos el impulso de toser.

¿Has estado constipado?

Has estado constipado, ya te has recuperado pero sigues tosiendo.

Es una etapa delicada porque es fácil confiarse y exigirle a tu voz lo mismo que le exiges cuando estás bien, pero aunque te encuentres bien, puede ser que tus cuerdas vocales sigan un poco irritadas unos días después.

Dedícale más tiempo a calentar tu voz durante unos días, y acorta tu tiempo de práctica o de canto.

Por ejemplo, en vez de cantar 1 hora al día, canta 4 veces al día durante 15 minutos, o 3 veces durante 20 minutos.

Con eso consigues que tus músculos vocales puedan ir volviendo a la normalidad poco a poco y permites que tus cuerdas vocales se sigan recuperando de la pequeña irritación que aún puedan tener.

Si te da la tos, para.

Sigue con los vahos aunque sientas que no los necesitas.

Toserás menos y tu voz responderá mejor.

¿Te pasa después de haber dormido?

Dejando de lado los resfriados y demás, puede ser que te ocurra al poco rato de despertarte.

No es ningún secreto que a la gran mayoría de la gente le cuesta más cantar y utilizar su voz en general durante las primeras horas de la mañana (después de haberse despertado).

Es posible que te entre la tos al cantar durante estas horas, pero no más tarde.

De ser así, la verdad es que los pasos a seguir para mejorar tu estado son los mismos que los que te he mencionado anteriormente, con una excepción: el calentamiento.

Cuando te despiertas, has estado durante un buen rato sin utilizar tu voz en absoluto por lo que tus músculos vocales, igual que los músculos de tu cuerpo, están “dormidos”.

Después, mientras dormimos generamos y tragamos menos saliva que cuando estamos despiertos, lo cual tiende a que tengamos la garganta más seca y seamos más sensibles a cualquier molestia que podamos tener en la zona.

Y también hay que decir que nuestro cuerpo se hincha respecto a cuando estamos despiertos, incluyendo los músculos vocales, lo cual contribuye a que cueste utilizar más la voz.

Todo esto puede hacer que tengas las cuerdas vocales un poco irritadas al despertarte.

Por eso, hacer un vaho por la mañana puede suponer una gran diferencia, igual que en el caso de estar enfermo, pero el calentamiento es clave.

Tienes que “despertar” tus músculos vocales poco a poco, empezando por ejercicios suaves e ir incrementando la exigencia poco a poco.

Con el calentamiento no sólo consigues que los músculos entren en activo, si no que también haces que empiece a haber movimiento de mucosa en tus cuerdas vocales y le das tiempo a tu cuerpo para que vuelva a humedecer mejor la zona.

Si no haces esos pasos previos y tratas de cantar al máximo rendimiento, la tos (y las molestias) pueden aparecer.

¿Te pasa mientras estás cantando?

Pongamos por caso que te encuentras perfectamente (nada de resfriados ni de alergias, y en caso de duda has consultado a tu médico) y que ya han pasado horas desde que te has levantado.

Te pones a cantar y todo va bien, pero al rato es cuando te da la tos, y probablemente aparezca mucosidad en tu voz.

En este caso, todo apunta a tu técnica vocal.

Utilizar la voz incorrectamente irrita las cuerdas vocales bastante rápido, y la forma que tienen de defenderse de eso es toser y/o generar mucosidad, la cual incita a utilizar la voz de forma más agresiva y el ciclo se repite una y otra vez.

Si ya estás trabajando en mejorar tu técnica vocal, tienes que tener en cuenta una vez más el tiempo que dedicas a tu práctica y/o canto.

Si es excesivo, por mucho que estés entrenando correctamente puedes llegar a fatigar tu voz.

Por eso te recomiendo que entiendas bien cómo y cuánto debes practicar/cantar.

¿Carraspear es malo para la voz?

Carraspear puede llegar a ser malo para la voz si carraspeas mucho y con mucha fuerza, pero hacerlo puntualmente no supone ningún problema.

De hecho, puede ser mejor hacerlo que no hacerlo, porque así puedes eliminar la mucosidad que puedas tener en las cuerdas vocales.

Sé que hay un poco de controversia sobre el tema, pero suelen ser ideas preconcebidas sin base demostrable.

Los comentarios en contra suelen decir que el carraspeo supone una colisión muy agresiva de tus cuerdas vocales, y es verdad, pero insisto en que hacerlo una o dos veces no te va a causar ningún daño.

Pero no me tienes que creer sin más, porque puedes probarlo tú mismo.

Suponiendo que no estés resfriado ni tengas ningún tipo de dolencia en la voz, si carraspeas una vez ahora mismo podrás ver como no sientes dolor.

Aunque insisto una vez más: no estoy diciendo que sea algo bueno para tu voz hacerlo de forma regular. Lo que digo es que no hay ningún problema en hacerlo puntualmente si eso te ayuda a liberarte de mucosidad indeseada que te está haciendo cantar incómodo o incluso forzar tu voz.

¡Y ahora deja de leer y ponte manos a la obra para toser menos! 😉

>